Un día estás planificando un viaje, ilusionada, con el amor de tu vida. Pero al día siguiente, todo ha cambiado. Ella opta por tomar otro camino, lejos de ti, y te deja con el depósito lleno.
El choque, la abstinencia (emocional y física), la crisis identitaria, los altibajos, la pena y los buenos recuerdos son algunas de las cosas que llenan este depósito. Un depósito que debe aprenderse a vaciar para no ahogarse. Al fin y al cabo, nadie muere por amor. Dicen.